Terrible. El local por fuera parece bonito, moderno...pero una vez dentro tienes la sensación de estar en un local a medias de montar, todo descolocado y sucio.
La comida mala, da la sensación de estar hecha sin ganas, para salir del paso.
La hamburguesa básica no, lo siguiente y la ensalada César...simplemente incomible, la salsa amargaba como si estuviese en mal estado.
No encuentro ni una sola razón para volver, y menos con los sitios tan buenos que tiene a su alrededor.
Si te cae alguien mal,recomiéndale este sitio...malo,malo,malo.
Carne vieja sin sabor y olor a camara.
Patatas de cartón piedra con salsa fosilizadas.
Aros de cebolla con sabor a aceite viejo.
Lo único potable las alitas y tampoco para echar cohetes..
Pedimos a domicilio y se olvidaron del postre..
Los peores 68 euros invertidos en mi vida..
Conclusión nunca mais..