Carta completa con excelentes vinos, sitio agradable con gran terraza buena comida y buen servicio. Muy recomendable
Buen servicio y excelente comida! No puedes visitar Úbeda sin pasar por Lupone!
El trato ha sido estupendo, lo hemos descubierto por causalidad y nos ha gustado. Acogedor, con hilo musical y buen ambiente
Trato excepcional y comida deliciosa.
Estábamos de visita en Ubeda y comimos en Lupone.Un restaurante con productos de calidad ,nos encantó el detalle del huevo en la ensaladilla rusa y el entrecot de buey muy bueno y sobre todo destacar la labor del camarero Felipe,el trato recibido fue espectacular,nos sentimos como en casa!Volveremos seguro 100%.
Un sitio estupendo, muy agradable, la comida fabulosa y muy abundante. Y el servicio magnífico. Felipe nos atendió estupendamente y en todo momento estuvo atento para ofrecer un servicio excelente.
Un sitio muy bueno en Úbeda.
Nosotros aprovechamos una oferta de la aplicación del tenerdor por lo que fue bastante económico (36€ dos personas) por lo que voy a obviarla.
La comida estaba toda riquísima, pedimos las patatas bravas, flamenquin, huevos rotos con foie y trufa y de postre la torrija. Todos los platos estaban muy ricos, aunque cabe destacar las bravas, ya que pese a su precio, que son 13€, son muy buenas bravas, con salsa claramente casera y ni mucho menos lo que te sueles encontrar en otros lugares que son todas muy parecidas. El flamenquin y los huevos rotos muy ricos y recomendables. Por otro lado la torrija estaba rica pero su precio nos parece un tanto elevado para lo que era (10€).
Lo dicho, un muy buen lugar para comer en el centro de Úbeda, con buen trato y un buen ambiente, por un precio de aproximadamente 25-30€/persona.
Recomendable.
Estuvimos un grupos de amigos de visita por Ubeda en Semana Santa. Y fuimos a comer. Nos atendio una chica llamada Maica super atenta con nosotros para que no nos faltara nada, majisima y nos recomendo algunos platos que cogimos para comer. El trato espectacular, volveremos.
Me parece que el turismo está acabando con los bares de Úbeda. 25€ por cuatro refrescos y un plato de patatas bravas resulta abusivo. Se puede encontrar un equilibrio entre calidad y precio sin recurrir a estos extremos. Por cierto, tuvimos que pedir al camarero los cubiertos, y también la carta, y también las servilletas. Si no, no nos traía nada de ello (con solo dos mesas ocupadas en total). No repetiré.