Fuimos a comer allí de casualidad y no nos arrepentimos. El trato de 100, y la comida otro tanto. Bocadillos y raciones generosas y precios asequibles.
La verdad me dedico a la venta ambulante en el sector hostelero y conocí a Juanjo y Débora por casualidad y cada vez que vengo hacer una fiesta por la zona de Ribeira - currubedo es Una parada obligatoria bocadillos ricos y contundentes y el trato es como si estuviera en casa mas no puedo pedir
Débora Juanjo un 10
Raciones y bocatas después de un paseo en un lugar con mucho encanto. Los dueños y la camarera muy amables y atentos. Para repetir sin duda. Ah y tocará entrenar para poder hacer y lograr el reto que tienen.
Lugar muy limpio y cuidado. Muy buena antención, estupendo vino y comida (aun por encima con opción vegetariana). Relación calidad-precio excelente. Desde luego que queda marcado como referencia para futuras visitas.
Paramos sin conocer, justo al lado del parking de Las Dunas de Corrubedo. Pedimos bocadillos de calamares y estaban excelentes, pan blanco y crujiente, súper lleno de calamares. Volveremos.