El peor sitio en el que me han tratado sin ninguna duda de españa e incluso podríamos decir que fuera de españa , me dedico a esto y nunca jamas recomendaría este sitio a nadie , la peor atención jamás recibida, mala calidad de la comida y una atención paupérrima , de verdad que por nada del mundo volvería ni lo recomendaría
Estuvimos el día de la madre y estaba lleno, aún así no hubo esperas, la comida la sirvieron rápido, el camerero super amable y estaba todo buenísimo. Los caracoles excelentes.
Menu. Ningún producto fresco la merluza seca y mal descongelada, la Vieira rellena seca de hace días. El saquito de bacalao.. el bacalao no se encontró.
La leche frita.. ni idea cuando se frió viene de nevera muy fría.
Se reconoce unos recuerdos de un restaurante que en su día debió de ser un clásico.
La atención demasiado confianza, bordea lo borde por momentos, otros simpático.
El mandil del cocinero a las 13,30 no se puede ni mirar.
Una pena, no haber mantenido el nivel hasta el final, hay que morir cocinando, y dejar un buen nombre y un buen sabor.
Que no es el caso.
Fuimos ayer 7 personas a comer y ninguna salió satisfecha.
Lo más irritante fue que habíamos pedido los platos del menú con 24 horas de antelación, por petición del restaurante para no hacernos esperar, uno de los platos era ensalada con queso de rulo de cabra y frutos secos , pues bien, sacaron una ensalada sin queso ni frutos secos , al comentarlo nos dijo el camarero que se les había puesto malo , y la solucuon fue añadir dos trocitos de atún de lata y medio huevo duro. El resto de los primeros platos normalitos. Los segundos, eran todo carne, un poco mejor, pero sin tirar cohetes, y los postres más tristes y sosos que la ensalada arriba mencionada. Lo siento pero no volveremos y desde luego no lo recomendaremos. Saludos