Raciones super pequeñas y calidad regulin por el precio, de ahí nos hemos tenido que ir a comer a otro sitio ya que nos quedamos con hambre.
Respuesta a la respuesta del owner:
Encima responden con mentiras, se pidieron 4 menus, a parte para los niños se pidio una pizza (la cual pedimos sin miel y aun así le pusieron miel) y tiritas de pollo que cabe destacar que fué una mini ración puesta en una especie de vaso, nisiquiera en un plato vinieron..
El mejor de Park Vallés.....
Camareros atentos y simpáticos.
Lugar acogedor
Menú superior caro para lo que te entra. Cantidades ridículas para el precio que pagas
Muy recomendable. Comimos el menú a mediodía y todo muy rico.
Un sitio que nos encantó.
Una muy buena carta con unos productos exquisitos.
El ambiente muy bueno, aunque con palomas por medio
Pero lo mejor el trato.. dos camareros de 10, sobretodo la chica rusa... Un encanto y nos trató y aconsejó como hay que hacerlo.
Enhorabuena porque tenéis un sitio de lujo. Volveremos
Le he dado dos oportunidades a este sitio y la verdad que es todo fatal. El trato de los camareros es totalmente una vergüenza. Todo lo que le pides (de la carta) nunca tienen. Pides unas bravas y tardan un siglo en entregártelas. Hoy he pedido una clarita sin alcohol y me ha contestado con la peor de las ganas “no hay, que más?”. A lo que le respondí educadamente “es lo único que tomo, asique nos vamos”. Me ha respondido “tengo mahou tostada nada más” acompañado con un gesto de mala gana. Le volví a insistir con mi respuesta y decidí levantarme e irme.
Creo que si el local no tiene algo de lo que el cliente pide, al menos contestarle adecuadamente. También trabajo en hostelería y no voy de sobrada por ahí.
Son obvias las limitaciones de encontrarse en la vorágine de un centro comercial, peroel servicio, en especial José, Hernán y una chica con gafas de la que lamento no haberle preguntado el nombre, supera las expectativas.
Un oasis de buen servicio dentro del infierno de Parc Vallès.